miércoles, 13 de diciembre de 2017

Moguer, 13 de diciembre de 2017 e. c.

Moguer, a 13 de diciembre de 2017 e. c.


La religión, desde que tengo manejo de mi conocimiento, me parecía una particularidad de muchas personas que no alcanzaban a comprenderse en su entorno por preferir leer guiones escritos para festividades comunes.

Tus abuelos me criaron en un entorno acorde a la época que transcendía con los ritos a cumplir sin salirse del redil, en lo cual no veo nada reprochable ni dudas sobre la intención. Es más, y lo añado para evitar dobles lecturas ni confusiones, admiro la forma en que lo hicieron. Por inercia, seguí los ritos establecidos contrariando lo que ya pensaba sin meditar en la repercusión que eso tenía realmente. Por fortuna, y lo añado por la misma razón, también me enseñaron a ser crítico y a tratar de tener mi propia visión de la vida, aunque a pesar de los pesares derivara en este inconformista irracional en que me he convertido, pero no sé ser feliz de otra manera que con la conciencia tranquila.

Hoy día no existe libertad de religión sino apología de la misma y no es porque sea lo que transciende en la época que, digamos, te corresponde a ti. Está impuesta por unos intereses mercantiles más que cuestionados pero como rentan a los poderes establecidos no parece que haya quien los mueva de donde están… Y he aquí el dilema, donde están. Aunque vulneren en exceso los artículos constitucionales (algo que ahora está de moda -no cuando ha hecho falta aplicarlo contra los desahucios, la sanidad pública, la educación,...- y que colocaría en la azotea si no hubiera renunciado definitivamente a ensuciar la biosfera con colores de trapo), especialmente los que dicen que no se segregará a nadie por ideología o religión.

Cualquier religión, con los conocimientos que hoy tenemos, que para eso hemos evolucionado, debería estar en el apartado particular de cada persona y quien la quiera que se la procure con sus medios como yo me proporciono otros hobbies en los que tengo más “fe” y pago por ellos. Dicho de otra manera, porque en este tema parece que hay que hilar fino, no estoy en contra de las religiones sino de que me saturen a mí con ellas y las impongan como lo hacen. Pero como quienes lo quieren no ceden al derecho de los demás y tienen la sartén por el mango, seguimos con las religiones en las escuelas, principalmente, para seguir “sodogmatizando” las próceres mentes que son las futuras promesas de seguir manteniendo vivo el negocio de la muerte (te aclaro que todas las religiones tienen en común el tema de la muerte porque es la inquietud normal de los animales) y caliente "el caldo de su cultivo".

Antes era obligado y nos hacían rezar y temer al demonio pues las comarcas eran menos globales y se podía varear más fácil al rebaño. Hoy, que lo tienen cogido con papel de fumar pero lo tienen, lo inculcan con juegos y canciones pegadizas para que tú (hay quien dice que esto es sólo suspicacia) te sientas castigada por tener que salir de TU aula cuando llega María José (tiene narices también la paradoja del nombrecito y que seas la única que no está apuntada a religión en tu clase) y te lleven a un cuartito con tamaño de cuchitril, humedad y cajas de cartón apiladas que eclipsan la luz natural que entra por las pequeñas ventanas. De nada te sirve la cafetera de los profes porque no echa leche con cacao. Si acaso, aunque el tono de voz que pusiste cuando me dijiste que era ahí donde te llevaban no me hace ser muy optimista sobre ello, los cuadros pintados por alumnos puedan desarrollar tu imaginación.

Supongo que te sentarás, para más colmo, en esa mesita dispuesta frente a la pared, de espaldas a la puerta y se me partiría el alma si creyera en esas tonterías poético-bíblicas. Supongo que, como a ti, lo mismo le sucederá a los compis de otras clases por la misma razón o por otra religión. Si te soy sincero, aguardo el momento en que sepas conectar el micrófono dispuesto en otra mesa y te explayes como con el micro que compartimos cantando tus canciones juntos en el estudio de la casa de papi y la líes lo suficientemente gorda como para que me llamen porque estoy deseando que eso suceda.

Estuve tentado de enviarle una carta como ésta que te escribo al defensor del pueblo pero es un cura retirado y mi "moral" se vino abajo porque, todo hay que decirlo, esto te lo vienen haciendo desde que entraste en el cole con dos añitos y medio, aunque en los cursos anteriores “hemos dado las gracias” de que te hayan permitido quedarte en el aula aunque no tuvieras los materiales adoctrinadores (esto no sé si debería contarlo porque, la verdad, es que no parece que el profesorado tenga culpa en esta imposición que atenta contra los derechos de l@s niñ@s y los humanos).

Tuve el debate con el director de tu cole (el anterior), que no revelaré y guardaré para la intimidad en que aconteció pero te diré que él nada podía hacer al respecto. No obstante, me resultó bastante esclarecedor para comprender muchas cosas, sobre todo el poder que tiene aún la iglesia sobre las instituciones y el celo que tienen guardándose de no salir de los colegios. Tienen un entramado que, quizás, algún día te cuente si esto te interesa saberlo.

Es por eso que me hierve la sangre con las religiones, pero sobre todo con la católica por enfrentamiento directo, y que esté cada vez más radicalmente activo en contra de la delusión que padecen. Podría alegar que es también por su bien pero son tan cerradicos...

Es por eso que me enerva escuchar a un católico hablar sobre la bondad cuando son incapaces de “desdemonizar” a quienes sabemos que los dioses no fueron más que la invención que necesitó el ser humano, a comienzos del desarrollo de su inteligencia, para comenzar a orientarse en su entorno y nos mantienen en lo que ellos vienen a llamar “infierno”. No, no te voy a relatar la bondad con la que han curtido su historia que ha terminado por ser la de tod@s. ¿Que los hay de buena voluntad y carácter? ¡Faltaría más! pero no es un carácter que predomine para que se pueda generalizar como se tiende a justificar.

Es por eso que te enseño los dibujos animados que encuentro donde explican toda la ciencia aunque contradiga la enseñanza de tus compis de clase, porque si se tiene cabeza para creer en las miserias de la humanidad se ha de tener también para conocer los entresijos que cortaron esos hilos. De momento, te hacen gracia el manzanazo en la cabeza a Newton, los viajes de Miguelito y María para explicar la relatividad,... de momento, creo, no es poco.

Es por eso que me ofende sobremanera cuando han tratado de reorientarme para que te incluya en la “sodogmatización” de los borregos que adolecen con las martirizantes campanadas. Que yo haya llegado a esta conclusión y manera de ser no ha de obligarte a pasar tú por lo mismo sino para que pueda evitarte ciertos escollos, especialmente de desarrollo mental, si no para qué “demonios” está la evolución.

Es por eso, también, que recelo de quienes se postulan en la indiferencia sin tratar de llegar a su propia conclusión. Y el hecho de que sea mayoritario me otorga una razón.

Es por eso que tu padre no ve lógico ni normal que te castiguen de esta mísera manera por no confesar con las ideas -anacrónicas- que parecen justificarse en denigrantes y arcáicas tradiciones y se postule como enemigo acérrimo y visceral contra quienes lo imponen y contra quienes lo justifican. No hay ninguna creencia religiosa innata sino impuesta, por lo que este hecho se convierte en opresión. 

Estos días son festivos para todos, ya estaban antes de que los adoradores del misógino Jehová se apropiaran de ella, terciando por medio el solsticio de invierno y un cambio de año. Es por eso que puedo celebrar sin complejos estas vacaciones tuyas tratando de mostrarte la diversidad, la importancia de que el sol “reinicie su vuelo”, que los complejos pertenecen a los opresores,…

Es por eso, también, que me satisface que me dijeras ayer que papá Noel (y mamá tampoco, jeje) y los reyes magos no existen porque son personas que se disfrazan –que tú lo has visto- o que durante la cabalgata te centres en los personajes de dibujos que desfilan en otros carromatos sin que yo te haya dicho nada sobre esto por temor a quitarte la ilusión que suponía te habían inculcado endulzada, o que detestes al otro señor porque está lleno de sangre. También supongo que cambiarás el argumento según el ambiente adulto que te rodee pero que tengas la capacidad de cuestionar ya me enorgullece sobremanera.

Creo que aceptas con naturalidad que tu papi no entre en esos juegos rituales y sabes por qué, pues ya me lo explicas y, qué quieres que te diga, tan mal no lo estaré haciendo cuando no me ves como un diablo ardiendo con cuernos y rabo… bueno, esto último ya lo hablaremos cuando seas mayor. Lo importante es que sepas que hay otras personas con otras creencias y tú aprendas a valorar todo por ti misma, y con la diversidad que te enriquecerá. 

En fin, y en definitiva, espero parecer más un padre primerizo que sobre-protector pero eso tú podrás juzgarlo con el tiempo. Así pues, para que juzgues con mayor criterio, te pongo a continuación un par de fotos de mi interior hirviendo, osease, del dicho cuartucho donde te confinan una hora a la semana.


Un besito, mijita. Te quiero mucho.



martes, 25 de julio de 2017

Moguer, 25 de julio de 2017 e. c.

Te lo confieso, mijita.
Uno de mis mayores placeres
consiste en cepillarte el pelo
mientras tratas de emularme
con tu muñeca de pelo andrajoso.
Y más ahora que, entre tanto,
me cuentas historias improvisadas
como cuando no sabías hablar
y era yo quien las inventaba para ti.

jueves, 6 de abril de 2017

Moguer, 6 de abril de 2017 e. c.

No trates de limpiarme las lágrimas, mijita, es inútil. Además, estas lágrimas han de brillar más que las medallas lustradas con sangre ajena.

He contribuido a traerte a un mundo enajenado en el que cada vez es más cruento el odio y la forma de demostrarlo que tiene el ser humano.

Por supuesto, no quiero que veas esas imágenes, no aún; tus cuatro añitos no deberían despertar esa conciencia. Y te lo escribo porque aún no lo puedes leer, porque no es fácil seguir callando mi dolor por las imágenes que llegan en el maldito progreso armamentístico de las guerras y de las ambiciones. Es cruelmente paradójico que sea esto lo único que parezca seguir el curso de la evolución.

He visto criaturas humanas agonizando, asfixiadas y, quizás por lo que supones para mí, me he sentido agonizar viendo la impotente lucha de niños y niñas incapaces de respirar tras el ataque perpetrado contra su aldea con gas sarin, un gas mortal que genera previamente la agonía, un gas que no se ve venir.

Supongo que hay formas de morir asesinado que escuecen en la conciencia más que otras pero no pienses, por ello, que no se registran mis lágrimas en el censo del dolor por las demás guerras y atentados en el resto de este jodido planeta, jodido por el ser humano.

No entiendo nada. Cómo hay seres humanos incapaces de sentir dolor con las imágenes, con los hechos, con las consecuencias de sus malditos actos.

No tengo ganas de hablar, sólo de llorar y gritar. Pero observo que eso ya lo hacen los familiares y allegados que atienden a esas personas y disuelvo mi rabia como sé, con esta forma de escribir.

De verdad, lamento que éste sea el mundo al que te he traído. No soporto ver cómo se retuerce entre espasmos un ser humano, languideciendo para morir, y mucho menos aún si esos seres humanos aún no han despertado la conciencia de la realidad que les rodea, tal y como te veo a ti, repleta de la sabia inocencia que -tal y como me decías el otro día- tienen los niños y niñas que "deberíais gobernar porque así seríamos todos felices". Y me escuece también que son cosas que tú tendrás que ver a medida que vayas creciendo y adquiriendo conciencia de tu entorno porque esto no parece que vaya a cambiar más que a peor, y eso cambiará todo lo magnífico y espléndido de tu ser en estos momentos, de todos los seres de tu edad.

Disculpa si no encuentro sentido a nada de esto cuando tú buscas en mí aún todas las respuestas.

Se pierde la cuenta de las sábanas blancas que cubren los cuerpos, estos sin sangre, cruelmente asesinados en tantos y tantos lugares del planeta y el cínico enfoque de much@s consiente que esto, a fin de cuentas, no sea más que una estadística de quien no sabe contar las lágrimas de dolor. Equilibrio lo llaman algun@s que deberían empezar por poner de su parte en tal cometido.

martes, 21 de febrero de 2017

Moguer, en algún momento de 2014 e. c.

Mira a las personas, una a una. Todas tienen su vida, sus sueños.

Atrévete a mirar a las personas a la cara, independientemente del status que crean tener, son seres humanos como tú y yo, con sus miedos y su historia a cuestas.

Mira a las personas siempre de frente. Pertenecen, como pertenecemos, a esa especie engreída tan insultante, tan ignorante, tan inconsciente, tan destructiva,… tan auto destructiva.

Mira a las personas a los ojos, valen tan poco que les gusta ponerse precio y mirar más allá aunque no sepan de dónde.

Mira a las personas mientras te queden ganas de seguir mirándoles.

domingo, 12 de febrero de 2017

Moguer, 12 de febrero de 2017 e. c.

Tengo la sensación de alcanzar un sueño que jamás me había planteado, mijita. Y te lo debo a ti.

Pasado mañana, celebraré mi cumple por todo lo alto, cariño... Dos sillitas ya... Iré a leeros poesía, y a cantárosla. Al principio, opté por ir sólo a tu clase pero el director me propuso ir a todas las de infantil porque los demás escritores sólo parecían querer ir a las clases "de los mayores". Acepté, y sólo suspiro por verte la carita ese día.

Ya puedes estar tranquila que no voy a tratar de mantener con tus compis las conversaciones que tengo contigo. Guiño-guiño.

Me invitaron para charlar y mostrar mis poemas pero me pareció mejor leeros poetas varios, acompañado de la guitarra, y cantaros un poco. Deseo que te guste y, a pesar de tu cortita edad, puedas mantener un pequeño recuerdo para siempre de ese día tan importante para mí y que espero que para ti también llegue a serlo.

Eso sí, ya me conoces, no podré evitar induciros a la discrepancia con l@s poet@s que os llevo. No obstante, os leeré a Gabriel Celaya (para cargar de presente las armas del futuro), Gabriela Mistral (¡ay, "madre, madre"!), Alfonsina Storni (para encontrar "la caricia perdida"), Antonio Machado (algún proverbio y algún cantar) y José de Espronceda (ya veremos qué tal se me da subirme a la quilla de vuestra aula para recitar "la canción del pirata); os leeré y cantaré a Gloria Fuertes, por el centenario de su nacimiento (trataré de que me digáis los meses del año, que no mintáis mucho y que paréis la guerra conmigo); y os cantaré por Federico García Lorca ("la tarara" sin jueves santos), Ángel Petisme ("mi gigante preferido", la canción que te acompaña y cantas desde antes de aprender a hablar), Nicolás Guillén (para jugar con "la muralla"), Pablo Guerrero (para "tapar la calle" que conocéis gracias a Pica-pica) y finalizaremos con "Susanita tiene un ratón", de Guillermo Méndez Guiú y Amparo Rubín, que sé que os gusta mucho, y a mí también porque el ratón "es un gran campeón jugando al ajedrez" y le gusta "el cine y el teatro, y baila tango y rocanrol".

Aunque tú ya has escuchado mis poemas, por razones obvias, no puedo llevárselas a tus compis. Eres la única a la que sus padres, aún, no han consentido que la sodogmaticen y, aunque te veas perjudicada por ello, no voy a caer yo en el mismo error, a pesar de que yo voy mostrando razones demostradas, no miedos particulares.

De todo, sin embargo, y aunque parezca que me desvío del tema, me quedo con la ilusión que me genera poder aportar algo tan grande para que puedas ser la envidia, por un día, del resto.

El martes, 14 de febrero de 2017, promete ser el mejor cumpleaños de mi existencia. No creo en el tiempo más allá de como un sistema de orientación para esta especie engreída de la que formamos parte, así que, mientras me preparo, voy aprendiendo a contar los suspiros que me quedan y los nervios que me allanan hasta ese momento.

Te quiero mucho, mijita, y espero saber estar a la altura de tal sentimiento.

sábado, 11 de febrero de 2017

Moguer, 21 de octubre de 2015 e. c.

Ya sabrás a estas alturas que papi es bastante suspicaz, sobre todo en lo relacionado con lo que deriva de la política y de los poderes.

Recientemente, has comenzado tu andadura escolar y no hacen más que surgirme dudas sobre si te han de preparar para ser una gran persona con un futuro ejemplar o una simple vasalla.

Aún no has cumplido 3 añitos y ya te están metiendo en la cabeza, con la excusa de realizar trabajos comunes en todos los centros educativos de este país, la falsa idea romántica de los príncipes y las princesas, que no hacen más que ensalzar una diferencia de género contra la que llevo luchando toda la vida y más en especial desde que formas una parte tan vital en mi vida, cariño, así como una diferencia de clases de la que parece que hay que hablar de refilón a pesar de ser la historia misma.

Porque claro, por lo que te escucho, te están hablando del rey y de la reina, de los príncipes y de las princesas, de los caballeros y de las damas,... pero nada te dicen de los artesanos, campesinos, ganaderos,... ni siquiera te he escuchado hablar de los bufones o de la peste negra.

Pues bien, mijita, estos últimos son los que han sustentado desde siempre la base de toda sociedad a pesar de su hambre, sus miserias y de ser quienes levantaron esos castillos que tan equivocadamente te están haciendo admirar, con su sudor y mucha sangre derramada, y digo equivocadamente porque no te hablan de arquitectura o arte, sino de la ostentación que predominó. Las miserables concesiones, por parte de la nobleza y de la curia, eran a cambio, por norma general, de la vida misma, un método de esclavitud que aún hoy se sigue viendo como algo normal... Claro, que, al final, todas terminan pareciendo ser confabulaciones en la cabecita de papi, ¿verdad?.

Y te despachan con un papel diciendo que tus papis han de ayudarte a hacer un trabajo sobre los castillos medievales con sus personajes, pero no he visto que aparezca en ningún lado el feudalismo, ni las cazas de brujas, ni el abuso de poder, ni los efectos de la inquisición que se llevaron a cabo en los interiores de esos mismos castillos, ni tantas otras características que no han hecho más que afianzar el estatus de los monarcas y de la iglesia, principalmente, en la parte, posiblemente, más oscura y retrógrada de la historia... de la humanidad. Porque aunque no lo parezca, o parezca que se olvide o que se instruye de manera no deliberada, la historia de la humanidad trata de seres humanos.

A fin de cuentas, estos son los mismos cuentos que tu papi se ha negado a leerte, o los ha modificado, y que hablan de toda esa miseria machista, religiosa, degradante,... con una fantasía de total normalidad.

¿De verdad que tenemos que empezar otra vez desde cero contigo, marcada por ser hembra e hija de tu padre?... te aseguro que hubiera sido mucho más sencillo, productivo, evolutivo y divertido para ambos (y para todos, pero en especial para ti que eres la única que no está apuntada a ninguna clase de religión en el cole -no salgo de mi asombro-) hablarte sobre el origen de las especies.

Me resulta paradójico que se insista desde los diferentes estamentos de la educación en que el principal papel lo tenemos que desarrollar o ha de estar reforzado por los papis, cuando me empieza a dar la sensación, mijita, de que lo que pretenden es reeducarnos a través vosotr@s e inculcaros, en esta edad tan ávida que tenéis, unos valores que, estadísticamente, tienden a desaparecer (según los estudios científicos que se van realizando sobre la evolución).

Moguer, 18 de septiembre de 2015 e. c.

Mira, mijita.

¡Qué bonita parece la luna incluso esta noche! Aunque te pretendan mostrar la influencia de seres imaginarios y miedo en el cuerpo por infinidad de prohibiciones de falsa moral e infundadas razones, esa luna que se presenta tan escuálida esta noche tiene mucha más influencia sobre nuestras vidas que todas esas falacias.

Pues bien, cariño, resulta una paradoja de mal gusto que esta noche presente forma de guadaña porque segará la vida de muchas personas. No la luna directamente, claro, pero será testigo de cómo acucia la muerte en las vidas humanas sometidas al yugo de su propia inhumanidad. Y no sólo esta noche, sino cada noche, pero te lo escribo en ésta.

Habrá, no lo dudo, infinidad de personas, salvando las franjas horarias, que disfruten de una u otra manera de esta luna tan bellamente mortal, bajo un halo de indiferencia, me atrevería a afirmar, sin cuestionar por ello una actitud despreocupada ni irracional. Y habrá quien perezca sin que tenga nada que ver con lo que pretendo mostrarte.

Pero nunca olvides, mijita, que bajo este cielo aparentemente sereno también se cobijan demasiadas vidas cuyo “techo” se muestra más “desconcertante” que para nosotros, por la soberanía de los "cielos desconocidos" y las razones incomprensibles de quienes se postulan, quienes se creen elegidos para ocupar un territorio idealmente delineado.

De ahí, y sé que me reitero, la importancia no sólo de la educación sino también, una vez recibida como nos la hacen concebir, de la capacidad de progreso y de abrir la mentalidad… De evolucionar, mi vida. Pues con ello es importante adquirir el sentido de saber apreciar el entorno sin magias ni milagros sino aceptando la ignorancia propia de las condiciones del lugar por parte de quienes estamos de arrendamiento en la naturaleza, de paso, nada más. Valorar lo mucho o poco que tengamos porque siempre será más que lo que otros ni siquiera conciben. Reclamar, sin embargo, lo que otros usurpan porque es más de lo que nosotros somos capaces de concebir. Y buscar un equilibrio, y procurar ser responsable con el legado de nuestras huellas.

Y también he de reiterarme en mi egoísmo para contigo, mijita, pues puestos a no alcanzar la utopía deseo que todo lo que te cuento no lo conozcas allende mis misivas, que pertenezcas a esa clase de personas que, por enamoramiento, por estudio, o por cualquier otra inspiradora evocación, disfrutes de “estas lunas” voluntariamente y no te acomplejes contando estrellas en las noches que te resten de vida, y espero que sean muchas y vivas. Que si tienes que saber de esto no tengas más experiencia que el que la capacidad de observación te permita.

Mira, mijita, bajo esta misma luna morirán de hambre o de frío infinidad de personas que no lo merecen, al menos, más que otras que descansan plácidamente tras planear el devenir de los primeros. Y, sin embargo, la necedad del ser humano completa portadas con uno tan sólo de los segundos como si fueran iconos de la ética, rendidos a una pleitesía tergiversada en el orden de factores.

Moguer, 9 de septiembre de 2015 e. c.

Comienza un nuevo ciclo en el que habrá que luchar contra gigantes retrógrados y recalcitrantes que manejan la educación pública, en la que mañana inicias una nueva etapa de tu vida, mijita.

Espero saber contrarrestar lo suficiente los fantasmas del pasado, aún presentes inculcando miedos y restando valores, para que puedas ser tú misma y actualizada a los tiempos que deberías vivir... para que puedas desarrollarte como persona tal y como hayas de ser por ti misma, orgullosa y sin complejos, como viene siendo y ha de ser.

No voy a cargar sobre tus hombros lo que no he sido capaz yo de levantar, pero no sólo te preparas para el futuro: Eres el futuro, mijita.

Brindo a tu (eterna) salud, mijita, por el proceso natural de la evolución y porque no se apague la lucidez que destaca en tus instintos ni el brillo de tu mirada.

Moguer, 3 de septiembre de 2015 e. c.

Mira, mijita, tiene la misma edad que tú.

Sus padres también querían lo mejor para él, sin duda, pero se topó con el peor animal que hay sobre la faz de la tierra: el ser humano, al que de humanidad ya no le queda nada.

Como ves, no juega con una pelota en la playa y ya no tiene miedo de que le alcancen las olas.

Podría haber ido contigo a la guardería y empezar el colegio la próxima semana, quién sabe, si en tu misma aula.

¿Y sabes lo que es peor? Mis lágrimas no van a solucionar nada, con el tiempo comprenderás por qué papi tiene el corazón más negro que los pulmones y odia a los gobernantes, y empieza a odiar a quienes les votan. Es injustificable ya esta ineptitud. Ya comprenderás el sentido de tirar la piedra y esconder la mano.

Y pienso en la próxima guerra que vendrá, y nos tocará a nosotros, porque será la consecuencia obvia de toda esta inhumanidad, y mira si soy egoísta que sólo pienso en cómo evitar que eso mismo te suceda a ti, antes incluso de pensar en cómo puedo evitar tanta atrocidad como individuo.

Ríe, mijita, ríe mientras puedas. Ya sabes que ahí está mi patria, en tu sonrisa. Espero que no venga nadie a expatriarme, nadie debería saber lo que es eso.

Disculpa que se me ahoguen las palabras, cariño, como el nene tumbado en la orilla.

sábado, 14 de enero de 2017

Vía muerta

Manuela, mijita,
quieren que la vía láctea
sea una vía muerta
bajo el "dominio" de algún dios,
conscientes -¡qué duda cabe!-
del peligro que corre
que el conocimiento y la sensatez
acaben con su mercado.

Cuídate de los necios
que no saben ver más allá,
son los que mejor vista tienen
para sus intereses acá.


© Juan Calle

Papi, papi

Mira, mijita -la digo-,
los días que transcurren
van a resultar transcendentes;
por eso, es necesario
tratar de estar lúcido
y conocer bien al enemigo...

"¡Papi, papi, mira, es Dora!".

Y, claro, la sonrío.
Querrán arrodillarte -prosigo-,
que temas a seres que no existen,
que lleves una vida firme y recta
sin salirte de sus líneas,
figuradas pero poderosas,
para que ellos vivan tranquilos...

"¡Papi, papi, mira, Bob Esponja!".

Y, claro, la acaricio.
Tratarán de mirarte -insisto-
como simple mercancía,
por encima del hombro,
ningunearán tus revoluciones
pero tendré mi mano sobre tu hombro
instando a que sigas adelante...

"¡Papi, papi, te quiero mucho!".

Y, claro, la sonlloro.
Mijita -la digo con voz entrecortada-,
tu nombre pesa en la historia
y en muchas conciencias,
tiene la fuerza de revoluciones,
demasiada responsabilidad, tal vez,
¡ay, Manuela!, ¡ay, Manuela!*

"¡Papi, papi,... rumba, rumba, rum!".

Y, claro, nos cantamos.


* Del tema "Manuela (una historia más de guerra)", de Patxi Andión.


© Juan Calle

Dedicatorias

© Juan Calle


Quisiera saber escribirte
sin salirme de tus renglones.

A Manuela


- - -

Embrión de sonetillo

Tras tu amniótico velo
sueño ñúes y sinsontes,
abro los brazos y vuelo
y alcanzo el horizonte.

Olfateo tus caricias,
disimulo tu sonrisa,
te celebro -¡qué albricias!-
sin pausa pero sin prisa.

Me ganas al escondite,
apuestas mi paz futura
y ya me das la espalda.

Te la devuelvo de envite:
Si no comes la verdura
no podrás ver a Mafalda


© Juan Calle